15/09/2020

Reformar el salón: 5 ideas para reformar tu salón sin obras

¿Hay algo peor que una reforma? Si vives dentro de la casa mientras los obreros realizan su labor, el polvo, el ruido, la falta de intimidad, la sensación de caos y la incomodidad general te quitan las ganas de volver a casa después del trabajo. Si la reforma se lleva a cabo en una vivienda vacía, lo que nos mata es la incertidumbre, la falta de confianza, el no saber si las cosas saldrán como queremos.

Sea como sea, no es raro que nos apetezca muchísimos cambiar el aspecto de nuestro salón pero ni un poco hacer obra. Pues bien, para solucionar esa dicotomía existencial hemos preparado este artículo con 5 propuestas para reformar el salón sin obras.

1. Reformar el salón sin obras y sin invertir. Empezamos por el más difícil todavía: ¿Es posible reformar el salón, o cualquier habitación de la casa, sin invertir ni un solo euro? En efecto, la respuesta que das, y que se corresponde con la verdad es que sí. ¿Qué necesitas para conseguirlo? Un poco de imaginación para poder mirar tu salón con otros ojos. Un salón que no sea demasiado pequeño. Que tu salón ya esté amueblado.

El truco es escoger los muebles y adornos que más te gustan y deshacerte de los demás, bien guardándolos, donándolos o vendiéndolos. Solo con eso habrás dado un paso en dirección al minimalismo. Lo difícil viene ahora: coloca los muebles que te quedan de una manera totalmente nueva. El efecto de cambiar los muebles de sitio te sorprenderá.

2. Coloca delimitadores de espacio. Puedes reformar el salón con un acto tan simple como colocar una alfombra. Y no hace falta que sea delicada ni demasiado cara. Las alfombras visten el suelo y dan un aire completamente diferente a cualquier habitación. Si el cambio de look que buscas es más radical, te proponemos un juego un poco extremo: cambia todos los cuadros y fotografías de tu salón por imágenes que representen alfombras del mismo tono que la que has comprado. Si no quieres invertir en el experimento, coge unas tijeras, una pila de revistas viejas y haz collages que simulen alfombras. Luego ponlos en los marcos que ya tenías. Verás el efecto de sofisticación que consigues mediante este DIY tan original.

3. Pinta los muebles. Hazlo poco a poco: primero una mesa de pie, luego el aparador, más tarde las sillas. Hay multitud de talleres online que te enseñan a restaurar muebles. Lo bueno es que para cambiar su aspecto no necesitas que estén estropeados. Reformar el salón de esta manera le dará un aire completamente personal y tú estarás entretenida durante tanto tiempo como quieras.

4. Reformar el salón cambiándolo de sitio. Esta es una versión un poco más compleja que la del punto uno. Pero si en casa tienes habitaciones de tamaño similar, siempre puedes intercambiar las funciones para las que las usas. Será casi como cambiar de casa sin pasar por reformas ¡ni por mudanzas!

5.- Cambia los textiles. Esta opción requiere una inversión un poco más alta que las anteriores, pero la verdad es que merece la pena. Los colores de moda pasan, pero vuelve. Así que hacerte con varios juegos de cortinas, cojines, cubre sofás, etc, siempre te irá bien.

En CINPASA estaremos encantados de echarte una mano con esto. ¡Llámanos!